El Retail Design Institute, la mayor asociación de la industria para los profesionales del diseño, entregó su premio anual al mejor diseño de tienda el pasado 12 de enero y reconoció a más de 45 proyectos de diseño de tiendas en más de 20 formatos por la excelencia en el diseño y ejecución. Los proyectos y los profesionales del diseño responsables fueron honrados en la 44ª gala de los premios anuales del Instituto, que tuvo lugar en el Times Center, de Nueva York, y Lizan Retail Advisors (LRA) estuvo presente como cada año.
Los premios internacionales al mejor diseño de tiendas, ahora en su año número 44, atrae a lo mejor de lo mejor en diseño de tiendas en todo el mundo. La competencia fue totalmente juzgada por colegas de la industria. En promedio, más de 200 participantes internacionales compitieron por los principales premios. Los diseños galardonados tienen como común denominador el perfecto entendimiento de los diseñadores de las necesidades de sus clientes y de los deseos de los consumidores. En general reflejan las mejores prácticas aprendidas en décadas, y no sólo son bellos sino funcionales e incorporan elementos de las nuevas tecnologías en retail y se adelantan a los cambios que estaremos viendo en la forma que la gente comprará en el futuro.
El proyecto ganador como el mejor diseño de tienda del año fue para T2 Shoreditch, una tienda de té en Londres diseñada por Landini Associates de Sydney, Australia. Esto fue lo que nos dijeron:
“Hemos admirado a T2 durante mucho tiempo, así que estuvimos encantados de ser invitados a participar en la evolución de su formato de venta”, dice Landini después de que T2 se acercó a la firma para poner en marcha la primera tienda internacional de la minorista en Londres. “Esta fue la primera tienda T2 que diseñamos, aunque hemos ido evolucionando la marca por un tiempo, afinándola y dándole carácter. La meca de uber-cool que es Shoreditch, es el lugar perfecto para esta evolución”, dice. 
En la calle Redchurch de Shoreditch, el espacio cuenta con un interior bruto y despojado, que sirve como una antípoda a lo pulido de las casas de té tradicionales britá- nicas, con el diseño dedicado a celebrar el antiguo arte de hacer y beber té. Ante el reto de un pequeño espacio con un techo bajo, Landini optó por una “biblioteca de té”, en lugar de “tienda tradicional”, completa con su propio bar, como una manera de superar los problemas de espacio.
“Nos hemos centrado en la creación de un espacio inteligible lleno de rincones oscuros que producen intriga”, dice Landini. “Probablemente la cosa más importante que hicimos fue catalogar y organizar los tés por tipo y ordenarlos con las opciones de tama- ño disponibles, frente a esta la barra de tés, que se extiende a lo largo de una pared y ofrece muestras diversas”.
Una biblioteca de tés de 30 metros de largo, que alberga más de 250 variedades de té, sumerge a los clientes en un banco de conocimiento sobre las mezclas de todo el mundo. En el centro de la tienda, estaciones de prueba de tés y mesas de aromas invitan a los clientes a probar, tocar, oler y comparar las mezclas y fragancias. Los mostradores son transparentes, hechos de capas de acero entrelazadas soldadas que exponen el funcionamiento interno de los cajones. Los métodos de elaboración de té se demuestran aquí entre una extensa gama de productos de té procedentes de todo el mundo.
Incorporando una paleta de tonos negros, T2 también ayudó a Landini a superar el reto más difícil del proyecto, el del manejo del espacio, al igual que el color naranja como aparece en el embalaje del té de T2. Los paquetes de té se utilizan para crear una pared sorprendente de naranja, intercalados con el empaquetado negro que cataloga los tés por tipo. Un techo de espejo tiene el efecto de duplicar el rango y el espacio.
El optar por una paleta de materiales industriales ennegrecidos, acero oxidado contrasta con la biblioteca de tés color naranja característicos de la marca de T2; el interior de metal se extiende a la calle Redchurch y abraza el frente de la tienda, reforzando la imagen ‘áspera’ de la tienda. Landini dice: “T2 tiene algunos elementos que forman parte de su ADN, y estos no son negociables. Estos incluyen un interior negro y la vieja cubierta de pared de papel periódico chino”.
La elección de acero ennegrecido para mostrar el té, en lugar de MDF pintado según lo ofrecido en las tiendas australianas de T2, permitió a Landini evolucionar algunos elementos sin la eliminación de la identidad de marca. “También hemos añadido algunas comunicaciones gráficas, la catalogación de los diferentes tipos de té juntos y la explicación de cómo se prepara el té”, dice Landini. Creo que este despliegue de los misterios y la magia del té será una parte importante de la evolución de la tienda. Al igual que otras marcas, ellos hacen esto muy bien en línea, pero en el canal de retail esto se había ido retrasando un poco.
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